La participación escolar

Este post que os presento tiene que ver mucho con la entrada anterior que trata acerca del centro escolar. Tras dejar de lado el centro, nos centramos en un tema incandescente que es la participación escolar. Hay muchos puntos de vista con respecto a este tema ya que cada persona piensa de una manera distinta al otro. Bajo mi punto de vista esta participación se subdivide en dos grupos: los alumnos y padres y el personal docente. Todo seguiría su curso si todos formaran parte de ello, pero esto por desgracia no es así. La pasividad es frecuente por ambas partes en cualquier nivel educativo.

Para paliar esta pasividad os propongo una serie de medidas para cada grupo (alumnos, padres y profesorado).

En primer lugar, creo que los alumnos son los menos proclives a descuidar esta participación escolar. Pero, me parece adecuado la inclusión de actividades extraescolares para reforzarles como personas y como grupo. Cuando escribo esto pienso en el Cross de navidad que realizamos todos los alumnos el último día de clase. Esta actividad a coste cero para el centro unía más a los alumnos y profesores y fomentaba la mejor convivencia entre ellos.

El segundo grupo está cada vez más alejado de esta participación o, más bien, participa solo cuando les conviene. Para este grupo había pensado en convivencias con otros padres para fomentar esa cercanía y paliar los problemas que suelen haber entre ellos. No tiene por qué ser algo formal, sino una comida en un sitio rural, una caminata para así  conocer la naturaleza, algo para disfrutar de tu tiempo libre y sentirte parte del entorno educativo.

Finalmente, el personal educativo podría proponer algún tipo de actividades de dinamización en horario no lectivo y sin remuneración por supuesto. Una idea sería hacer una especie de trivial con las materias de sus hijos en la que padres e hijos se enfrentarán. El docente llevaría la voz cantante haciendo de presentador y al final comer todos juntos pasando un tiempo agradable.

En suma, todas estas propuestas están formuladas para fomentar el debate, pero también quiero dejar claro que esto solo se puede llevar a cabo con la voluntad de los tres grupos. Excluyendo a los alumnos, meros cabezas de turco a mi entender, los padres y profesores tiene que aunar fuerzas para fomentar esa unión y participación siempre pensando en el alumno.