En el anterior informe
Pisa, Castilla y León fue la mejor comunidad en enseñanza no universitaria del
país. A pesar de esto, no es oro todo lo que reluce. Hay que realizar muchas
mejoras para seguir perfeccionando esa calidad de estudios.
Unos de los puntos fuertes que podemos sacar
es el programa bilingüe. Nuestra comunidad es la segunda en proyecto bilingüe y
se han conseguido muchos éxitos sobre todo en las enseñanzas de 3 a 6 años.
Otro punto a favor, sería la lucha por los casos de abandono escolar; nuestra
comunidad impera por buscar una salida estudiantil o laboral digna para que los
alumnos no sean unos fracasados.
Uno de los aspectos
débiles que podemos entrever es la exclusión social. Hay 20 centros en los que
la totalidad de los alumnos son de etnia gitana. Esta misión es difícil debido a la poca colaboración
de las familias que utilizan a sus hijos para recibir algún tipo de ayuda del
estado. Esto puede ser terrible para los docentes, ya que ellos solos no pueden
encauzar a esos alumnos. Otro de los problemas es los bajos resultados de
algunos colegios que intentaran superarse con nuevas formas de trabajos.
En suma, hay que seguir
trabajando con estas medidas e implantando todas las mejoras que Fernando Rey
tiene en su tintero pero pensando siempre en el bien de los alumnos y
profesores y no tanto en el dinero.
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